Recordemos las características que teníamos cuando éramos niños u observarlas en los niños que nos rodean y volver a reconectar con ellas para utilizarlas en nuestro favor como adultos.
Usemos este mes como una excusa para conectar y no perder de vista las virtudes propias de la infancia, para reconectar con nuestro potencial y reconocer nuestra valía. Hay muchas, pero me gustaría destacar 10 y que cada quien vaya pensando cómo le ayudarían a ser un adulto más completo y ligero, integral y feliz.
1. Los niños viven en el presente. Tienen una capacidad para no estar temerosos del futuro ni atorados en el pasado, cada instante es toda su realidad y pueden disfrutarla al máximo.
2. Tienen gran capacidad de asombro. Se sorprenden conforme van descubriendo el mundo, esto a su vez promueve su curiosidad por seguir conociendo. Conforme crecemos el mundo deja de sorprendernos vemos las cosas como comunes y dejan de llamar nuestra atención. La aceleración y sobre estimulación juegan también en nuestra contra en este sentido.
3. Inocencia. Esto les permite ser naturales y confiar en quienes le rodean y sobre todo les permite pensar bien de los demás. Tienen poca o nula malicia y esto les previene de juzgar a los demás.
4. Capacidad de olvido y perdón. Esto lo podemos observar cuando juegan unos con otros, se enojan, se molestan y vuelven a jugar. No se quedan atorados en el sufrimiento, no resienten. No esperan que alguien se disculpe, simplemente siguen adelante.
5. No tienen prejuicios. Al no tener preconceptos instalados en su mente no juzgan ni a las cosas ni a las personas.
6. Son sinceros. Esto se los da el ser genuinos, honestos. No tienen filtro y en este sentido esta es una ventaja ya que son directos al expresarse. Esto les da una una simpleza admirable. Son reales, entienden y ven el mundo como es.
7. Son espontáneos. No tienen barreras para expresarse o para actuar y lo hacen con total despojo, no temen al ridículo, no lo conocen esto hace que se atrevan. Como no tienen consciencia del qué dirán o de los compromisos sociales pueden mostrarse naturales.
8. Tienen confianza. Creen en lo que se les dice y creen plenamente en su potencial y en ellos mismos. Confían en su potencial de manera natural por eso sueñan con hacer hazañas por el mundo, ser bomberos, superhéroes, etc.
9. Entusiasmo y capacidad de entretenerse. Cada día lo inician llenos de energía y de movimiento deseando salir al mundo y al mismo tiempo tienen una capacidad de jugar con cualquier cosa y en cualquier momento. Pueden divertirse y conectar con otros.
10. Imaginación. Tienen capacidad de crear un mundo fantástico y ver maravillas en cosas simples o cotidianas. Su creatividad no tiene límite.
